La NASA creó esta imagen de la Tierra con selfies recibidos
Por
Ángeles Negrín

¿Qué es un “Selfie”?

Un selfie es una foto que tomas de ti mismo y que posteriormente de forma habitual se cuelga en una red social.

Los selfies empiezan a aparecer en nuestro vocabulario hace años pero el boom de este término es a partir del 2013 y gracias a las redes sociales. Gracias al impacto de las redes sociales en todo esto, las empresas comienzan a preguntarse si es buena idea o no usar selfies para autopromoción y creación de imagen de marca.

¿Cómo enfocan las empresas el uso de los selfies?

Las empresas quieren sacar provecho de esta herramienta de promoción, sin embargo, crear una marca requiere darle fuerza, personalidad y hacer que de algún modo enganche al público final. Además hay que tener en cuenta algo muy importante que pocas veces pensamos antes de plantear cómo crear imagen con nuestra empresa. Las redes sociales pueden encumbrarte, pero también pueden hundirte y muchas veces no tenemos el control de todo lo que ocurre sobre nosotros en las redes.

Imaginad que alguien saca una foto muy censurable moralmente y detrás de esta imagen está un logo enorme de un anuncio de tu empresa. Sin querer, seguramente en unas horas, tu imagen se ha hecho famosa, sin embargo y de forma inconsciente la gente la asocia a algo realmente negativo. Ahí está, no podemos controlarlo todo, sin embargo, debemos estar preparados para que a veces este tipo de circunstancias ocurran.

Una vez que somos conscientes de que no podemos controlar todas las situaciones en las redes sociales, hablemos de las que sí que podemos controlar. Si queremos usar los selfies para crear marca debemos regirnos por las reglas de las redes sociales.

  1. Honestidad: si publicas un selfie con algo relacionado con tu empresa, no mientas, no truques las fotos. Si promocionas un hotel, no quieras parecer un hotel de súper lujo si sólo eres una pensión modesta de ciudad. El público no te lo perdonará.
     
  2. Diversión: el gran público de las redes sociales visualiza en una proporción meteórica las cosas divertidas. Preséntate con algo que haga gracia y tendrás mucho más éxito que si haces una presentación normal de tu empresa. Esta última seguramente sólo la verán tus amigos y familiares directos y a veces ni siquiera esos.
     
  3. Videos de corta duración: a veces conseguimos un buen tema para un video, incluso para un selfie, sin embargo la gente en la red no visualiza algo mucho más de un minuto. Procura que el contenido sea corto y directo.
     
  4. Recurrencia: si lo que quieres es crear marca no basta con hacer un selfie un día y ya no volver a publicar nada en 6 meses. Es importante que tengas un plan de comunicación. Esto deberías establecerlo a priori, saber los días en los que tu fan page tiene más visitas, horas en las que ocurren las visitas, etc. Con este estudio delante, podrías establecer un plan de comunicaciones y publicaciones en tus redes sociales. Parte de este plan, serán los selfies
     
  5. Personalización: si optas por algo como el selfie, entonces debes personalizar toda tu empresa. Tus clientes y seguidores deben saber quién está detrás, poner cara a todo el equipo. Esto hoy en día cada vez es más y más importante, especialmente cuando hablamos de redes sociales.

Y al final lo más importante, no olvides nunca que siempre estás hablando de tu empresa, piensa la imagen que de verdad quieres transmitir a tu público final.